Visiones

Los traumas siempre vuelven, por eso son traumas. Ya conté más abajo que en las últimas vacaciones compré lotería con Quijano en San Vicente de la Barquera. Después, entre cañan y caña, hablamos de lo que haríamos si nos tocaba. Estaba claro que citar a todos los colegas en el aeropuerto y coger el primer avión que saliera a cualquier sitio para pasar unos días de juerga loca era la mejor opción, pero como ninguno de vosotros ha recibido esa llamada, ya sabréis que no nos tocó. Y el otro día me di cuenta por qué. Teníamos que haber cogido el teléfono y haber llamado al colega de Quija que conoce a Bustamante, para preguntarle al ídolo sobre el número que iba a ser premiado. Y es que este tío es un visionario. Ha sacado un vídeo de una de sus canciones que lo demuestra. El tipo recupera la estética de “Entrevista con el vampiro”, con ese pelo largo negro, las botas de montar a caballo por encima del pantalón, pañuelo blanco anudado al cuello y paseos tambaleantes y dolidos por una sala de columnas imitación Grecia, espeluznante documento. Además, se dedica a pasear tres galgos por un laberinto, donde aparece de vez en cuando el espíritu de su amada, una adolescente (yo tengo 33 y tú eres casi una menor...) la mar de mona. Y a qué no sabéis como se llama la tipa?. Pues lo pone en su tumba, a la que se abraza Busta desesperado. Su nombre es Leonor, otro gran ídolo de masas, y sin bajar del andamio ni nada.